“A los ojos del visitante, queda claro que la verdadera riqueza de esta tierra, es la misma que desde el Neolítico hasta el día de hoy permanece oculta para los paisanos del lugar. Ese tesoro, que va mas allá de lo recogido en la antigua leyenda relatada por Escolano, no es otro que el manantial de la laguna conocida como Albufera, la misma que desde entonces permitió el progreso de la vida en esta villa”.